Dream Theater es una banda que se ha convertido en una marca, es este tipo de banda que hoy por hoy tiene una base de fans tan grande y fiel que probablemente no se de cuenta de sus faltas. De hecho los fanáticos de Dream son ese tipo de seguidores que creen que sus ídolos son incapaces de errar, pero ¡oh sorpresa! No sólo se deshicieron de uno de los mejores bateristas que hay hoy en día, además miembro fundador de la banda. Sino que además llevan años y discos tratando de imitar el que fue para algunos su mejor álbum “Metropolis part 2”, que además a mi parecer es un buen material, pero no es mi disco favorito, ese vendría siendo el “Train of Thought”. Esta banda es para mi y para muchos otros una banda de fase, esa agrupación que en algún momento te impresiono por su virtuosismo, pero conforme maduras como escucha o como músico, se convierte en una banda pretenciosa que a pesar de que te sigue agradando cada vez te encuentras recurriendo menos y menos a su música, lo que alguna vez me atrajo a Dream Theater fue su teatralidad, hoy ese misma característica se me antoja repetitiva y snob. Se que para este momento muchos estarán de ganas de colgarme de las partes nobles (los más fanáticos) y otros estarán arrancándose los cabellos gritando a los cuatro vientos “¿Cómo puedes decir eso?”. Es simple esta banda ha dejado de impresionarme desde hace muchos años, mi primer gran decepción fue ese disco que todos aman, ya antes mencionado. Me di cuenta de que sus malabares musicales, cada vez más “complejos”, me presumían en vez de contarme la historia, además me di cuenta que yo no era de esos seguidores de la banda que están ansiosos de tomarse una foto con John Petrucci o sacar un cover de “the mirror” solamente para demostrar que puedo hacerlo. Pero no se confundan, si admiro la capacidad técnica y musical de estos hombres, sólo que no considero que hayan hecho algo fresco en más de una década. Se han conservado fieles a su sonido y lo han hecho tan bien que me parece que cada disco después del “Metropolis part 2” ha querido ser ese mismo disco, con la honrosa excepción del “Train of Thought”, pasando por albumes más bien terriblemente malos como el “Octavarium” y muy buenos como el “Six Degrees of Inner Turbulence”. Pero hoy nos atañe su última entrega, el “Dramatic Turn of Events” del 2011, con todo y baterista nuevo.
Este es un disco que uno no tarda mucho en analizar, ya que si es verdad que los instrumentistas son más que excelentes en ejecución, técnica y por supuesto la ya consabida teatralidad, no sorprenden en ningún momento. El álbum abre con “On The Backs Of Angels” que prepara el terreno para el disco y con los primeros 30 segundos sabes que escucharas otro álbum de Dream y que contendrá un par de canciones agresivas, una muy larga y llena de cambios y al menos una balada introspectiva, digase nada nuevo bajo el sol. Pero la pista no. 1 de este material, no termian de convencer, no es agresiva y no es lo suficientemente progresiva, es como una canción de marco más bien. Luego sigue “Build me up, Break me down” que se dibuja como una canción ambiental con sonidos de sintetizador por todos lados, otra canción del estilo de la primera, con realmente muy pocas sorpresas, pero tal vez un poco más agresiva en sonido, pero nunca se convierte en una canción pesada del todo. La canción No. 3 “Lost not Forgotten” es una de esas canciones que van subiendo de sonido, primero da la impresión de ser una balada y luego poco a poco se va transformando en una de las canciones agresivas típicas del disco de “Dream Theater”, hay una excelente ejecución de tecaldo en ella y varias frases muy metaleras, así como un poco de la voz agresiva y ruda de la que Labrie es capaz. “this is the Life” es una canción de esas que han hecho el sello de la banda, con muchos cambios y llena de un sonido de piano, esta podría decirse que es la primera balada del disco y por supuesto de inmediato te regresa como era de esperarse al tan mentado “Scene from a memory”. Esto continua por todo el álbum, que después de un rato confirma tus sospechas, es predecible. Pero debo ser honesto a la verdad, no es un mal disco, como siempre Dream se especializa en una técnica inmaculada y en que el disco suene a lo que debe sonar un disco de la banda. No como otras bandas que por cambiar terminan por traicionar a sus fans, la banda musicalmente no se siente detenida y por ultimo el disco a pesar de nos ser fresco es disfrutable, definitivamente es recomendable para los fans del metal progresivo y por supuesto para los seguidores de “Dream Theater”
Para terminar debo mencionar que esta banda es una de las más influyentes en lo que refiere al metal progresivo y a todo el metal hoy por hoy y es por eso que mi crítica es más dura con ellos, se que no soy uno de sus fans más acérrimos pero si he seguido su trayectoria y tengo todos sus discos. Espero que todos aquellos que se interesen en este disco lo disfruten mucho y los que no, pues hagan lo que yo, escúchenlo por saber.
Carlos Tello
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Hola queridos lectores, antes que nada y fuera de tema quiero pedir una disculpa publicamente a mi tocayo quien me envió su comentario sobre el disco desde hace algunos dias, pero yo no habia tenido oportunidad de escribir mi parte y hacer la publicación. Pero bueno, mas vale tarde que nunca asi que sin más preambulos comienzo con las impresiones que los muchachos de Dream Theater y su más reciente disco “A Dramatic Turn of Events” generaron en su servidor.
Una caracteristica muy importante y sobresaliente del disco, es que suena a Dream Theater y de eso no hay duda, y creo que eso es algo positivo pues no cualquier banda llega a generar un sonido propio e identificable y a demás de todo exitoso; pues no se puede negar que Dream es actualmente una de las bandas de metal mas exitosas y que ha amasado una gran cantidad de seguidores o "fans" entre los que me puedo contar. Aunque la moneda tiene dos caras y ese éxito adquirido con discos pasados tiene también la desventaja de que Dream siempre sera comparado contra si mismo y sus discos anteriores, ¿Será posible que recibamos discos tan buenos como Scenes from a Memory, Six Degrees of Inner Turbulence o Train of Thought? Dicho de otra forma, ellos mismos han alzado la barra y ahora deben de ser juzgados bajo otros estandares necesariamente mas estrictos.
En general el disco no es malo, muchas bandas sueñan con producir musica a ese nivel y probablemente eso sería suficiente para lanzarlas brevemente al estrallato. La tecnica, como era de esperarse, es impecable e imprecionante por todos los integrantes al grado que a veces uno se llega a pregunatar si más que musica intentan hacer una demostración de talento y habilidad, como en un circo. Pero algo falta, y desgraciadamente es una sensacion que otro par de discos como el Octavarium tambien generaron em mi. Les falto una pizca de sal, que hiciera sobresalir al disco entre la multitud, les falto esa fuerza que demostraron en Train of Thought la inventiva y magia del Scenes from a Memory o lo interesante y algo extraño del Six Degrees y simplemente parecen haberse estancado en una formula mágica probada y comprobada que en lo personal comienza a cansar un poco.
Es importante mencionar, que en este disco el antiguo baterista y "leader" Mike Portnoy abandonó la banda y fue reemplazado por otro muy talentoso musico Mike Mangini antes de que el disco fuera grabado. Seguramente esto debe de haber influido en algun grado, pero el sonido general y desarrollo del disco en realidad no es tan distinto a sus discos anteriores como para pensar que el nuevo Mike pueda considerarse un lastre. Claro que el necesitará tiempo de adaptación para comenzar a aportar creativamente e imprimir su estilo. Aunque quedo muy claro al ver los videos de los castings que la banda buscaba un baterista que pudiera continuar con el estilo de Portnoy y que probablemente la decidieron "sonar a lo mismo" y no hacer nada extremo para ayudar a los fans a asimilar el cambio; pero creo que el metal progresivo no puede darse esos lujos por mucho tiempo y necesitaran entregar algo mas impresionante en el futuro.
El disco comienza con “On The Backs Of Angels” que es una de las canciones mas pesadas del disco y se es una de mis favoritas, tiene una introduccion instrumental, unos muy interesantes arreglos con los teclados muy caracteristicos del señor Jordan Rudess, la inconfundible voz de James LaBrie y con una duración de casi nueve minutos es una pieza que no va nada lejos del estilo de la banda y de el genero musical. “Lost not Forgotten” la 3ª pieza del álbum es otra canción rescatable en la que nuevamente Jordan Rudess hace un poco de su magia y John Petrucci la rienda suelta a su guitarra con
Además el disco incluye un par de baladas, que no puedo decir que sean malas y considero que la idea de incluir baladas es buena para ayudar a captar a más publico (leanse "las novias de los metaleros de corazón"). Pero en un disco que en si no es muy pesado tiene para mi gusto una balada de más. Considero el contexto muy importante, porque Train of Thought tiene 2 canciones instrumentales muy tranquilas y ninguna de ellas sobra.
Algo que puedo decir que me molestó un poco del disco es un sonido o efecto, no se exactamente de donde venga, que aparece en canciones como “Outcry” y “This is the Life” es una especie de ruido o hiss (como en Outcry en el minuto 3:30-3:50) y que acustimanete me lastima un poco.
En resumen, “A Dramatic Turn of Events” no es un disco malo pero tampoco especial, no creo que pase a la historia pero tampoco impedirá que compre boleto para verlos en concierto en la proxima oportunidad que tenga ni que escuche su proximo disco cuando este venga. Desgraciadamente esto no podra seguir asi por siempre y espero que en un futuro Dream me vuelva a sorprender como lo hizo anteriormente y no solo confirme que las grandes bandas tambien pueden perder el rumbo, como Metallica alguna vez nos lo mostró.
Carlos Pando
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